Cuando buscamos una impresora barata para pymes, encontraremos una extensa exposición de modelos que varías de tamaño, funciones y características, velocidad de impresión, calidad, modos de impresión…
Las pequeñas y medianas empresas deben saber qué necesidades de impresión tienen para poder encontrar la impresora más adecuada para el tipo de negocio, y a la vez conseguir ahorrar cada mes gracias a este dispositivo.
¿Qué especificaciones técnicas debemos tener en cuenta adquirir uno de los dispositivos más importantes para la empresa?
En este artículo os queremos dejar algunos consejos para encontrar impresoras baratas para pymes que resuelvan vuestras necesidades de impresión y os permita ahorrar cada mes.
Define el tipo de impresoras que necesitas
Hace pocos años las impresoras solían dividirse en dos grandes categorías: de impacto y de no-impacto. Las impresoras de impacto son por definición aquellos dispositivos que trasmiten la tinta al papel gracias al golpe de un martillo mecánico sobre la cinta. Para tener una idea basta pensar en una máquina de escribir con la diferencia que las tecnologías utilizadas son otras, por ejemplo una corona giratoria que contiene los caracteres o agujas que trazan puntos sobre el papel.
Actualmente, sin embargo, la mayoría de impresoras se clasifica según el tipo de tecnología empleada o la función desempeñada cara al usuario final. Para más información visitad alguno de nuestros artículos sobre Tipos de impresoras.
Cómo encontrar impresoras baratas para Pymes
La respuesta a esta cuestión depende de otra pregunta: ¿para qué voy a utilizar mi futura impresora?
Adquirir una impresora sin tener en cuenta el futuro gasto en consumibles nos podría salir muy caro. Conseguir una impresora barata no es solo conseguir el precio más bajo, o la oferta de última hora, sino ponderar el uso del aparato y estimar aproximadamente la cantidad hojas que imprimiremos diaria o semanalmente.
En el caso de las impresoras para oficinas, puede ser recomendable recurrir al renting ya que ofrece mayores ventajas que la compra de nuevos equipos. Por un lado, necesitan una menor inversión inicial ya que se paga en cuotas mensuales reducidas. Además estas cuotas incluyen el mantenimiento de los equipos y siempre garantizan el perfecto estado para su uso. Por último son una buena opción para poder adquirir la tecnología más avanzada del mercado por un bajo coste, obteniendo equipos más eficientes y productivos.
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