En ocasiones, a la hora de adquirir un producto de calidad, nos fijamos en las grandes funcionalidades, pero no reparamos en los pequeños detalles. Como dijo aquel sabio: “los pequeños detalles son los que mueven el mundo”, y uno de estos detalles nos pueden ayudar enormemente a la hora de desenvolvernos en nuestras tareas diarias: es el caso de contar con una fotocopiadora con gran capacidad de papel.
En qué me ayuda la capacidad del papel
En más de una ocasión no podemos frenarnos en nuestras tareas: Trabajamos sobre documentos, tenemos abiertas multitud de ventanas en el ordenador con distintas tareas, un bloc a nuestro lado donde realizamos anotaciones… Es la era multitasking donde todos hacemos de todo y al mismo tiempo.
Esto conlleva en que una simple interrupción, puede afectar notablemente a nuestra productividad, y esa interrupción puede venir de algo tan sencillo como cargar de papel la fotocopiadora profesional. La tecnología se crea para estar al servicio de los empleados que la usan y la impresora no es menos en esta cuestión.
Es por ello que resulta muy importante que ella haga todo el trabajo que necesitamos mientras nosotros continuamos con el nuestro. Es decir, que no nos tengamos que preocupar de nada más cuando pulsamos el icono de imprimir o dejamos documentos fotocopiándose en nuestra impresora multifunción. Si no disponemos de una gran capacidad de papel, en casos de muchas impresiones o documentos extensos no sólo tendremos que ir a cargar de papel el dispositivo si es limitada su capacidad, sino que también tenemos que estar atentos de que no se acabe, ocasionando pérdidas continuas de atención.
Por qué es importante la bandeja de salida
Junto a la capacidad de papel que tenga la impresora, igual de importante resulta una bandeja de salida amplia y cómoda. No tiene sentido alguno que podamos despreocuparnos de la capacidad de papel y dejar que la fotocopiadora imprima con total tranquilidad porque no se va a quedar sin papel, pero sin embargo tenemos que estar atentos de que el papel no se acumule hasta desbordarse en su bandeja de salida, ya que esta situación produce que la solución que aporta una gran carga de papel, se pierda al no poderse acumular a medida que se imprime.
Por otra parte, incidiendo en la “era multitasking”, debemos considerar que no somos los únicos que hacemos uso de la fotocopiadora, por lo que puede ser muy probable que dejemos en la bandeja de salida unos documentos y que estos se acumulen con otros de nuestros compañeros. Tener capacidad de poder almacenar grandes cantidades permite que ninguno de los dos acabe finalmente atascado o por los suelos por una bandeja de salida insuficiente.
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